Los casos de uso de los asistentes de voz en el cuidado de la salud son variados y cubren una amplia gama de necesidades. Tienen el potencial de revolucionar la relación entre los proveedores de atención médica y los pacientes, así como la forma en que se brinda la atención.

En los últimos años, los asistentes virtuales de IA se han vuelto cada vez más populares y han pasado a formar parte de nuestra vida diaria. Equipados con algoritmos de aprendizaje automático y procesamiento del lenguaje natural, ayudan a transformar las acciones cotidianas, ya sea para brindar apoyo o facilitar las tareas.
Dentro de los asistentes virtuales, aquellos que son basado en voz han supuesto una gran revolución, ya que han conseguido una enorme penetración en muy poco tiempo. Según la II Estudio sobre Voz y Audio in Spain, llevado a cabo por Soluciones Estratégicas de Investigación de Mercados (SEIM) y Volcan Prodigioso, más de El 56% de la población de Internet en nuestro país los utilizamos actualmente.
Pero, ¿por qué se han vuelto tan populares? En gran parte porque la tecnología de voz ofrece una forma natural de interacción hombre-máquina, lo que permite a personas de todas las edades y diferentes niveles de conocimientos tecnológicos acceder fácilmente a la información. Además, los asistentes de voz participan en conversaciones directas a través de interfaces lingüísticas, lo que contribuye a una interacción más humana, mejorando la percepción del usuario.
El impacto de los asistentes de voz (VA) en las acciones cotidianas es claro y conocido por todos, pero ¿qué ocurre cuando esta tecnología se integra en otros campos, como el sistema sanitario? Analicemos los beneficios que los VA aportan a la atención médica y cómo están transformando la continuidad de la atención.
Asistente virtual basado en voz en el cuidado de la salud
Es bien sabido que el sistema de salud se enfrenta a una problema de sostenibilidad, debido a la falta de profesionales de la salud y su elevada carga de trabajo, los elevados costos y el envejecimiento de la población. Para reducir los costos de la atención y lograr mejores resultados de salud, el sector de la salud se centra actualmente en mejorar la eficiencia de los procesos y aumentar la participación de los pacientes, especialmente mediante digitalización de los servicios.
En este sentido, los asistentes virtuales tienen el potencial de revolucionar la relación entre los proveedores de atención médica y los pacientes, así como la forma en que se brinda la atención. Su integración en el proceso de atención permite a la industria de la salud crear viajes más sencillos, amigables y personalizados para sus pacientes, en los que se sienten acompañados e involucrados en todo el proceso. Los VA nunca se desarrollan con la intención de reemplazar la interacción humana, sino más bien para servir como una herramienta para reunirse expectativas crecientes de los pacientes de experiencias digitales verdaderamente útiles y para hacer el trabajo de los médicos más fácil, rápido y eficiente. Por lo tanto, el éxito de cualquier asistente de voz en el cuidado de la salud depende de las experiencias de los usuarios, que deben ser conversacionales, intuitivas, naturales y con un fuerte componente empático.
Pero, ¿qué casos de uso reales encontramos en la industria de la salud y qué beneficios aporta al sistema? ¡Profundicemos un poco más!
Casos de uso de asistentes virtuales basados en voz en el cuidado de la salud
Los casos de uso de los asistentes de voz en la atención médica son variados y cubren una amplia gama de necesidades, pero se centran principalmente en dos áreas principales: mejorar la atención de los pacientes, la participación y el acceso al sistema, y mejorar los flujos de trabajo para reducir la carga de la atención y lograr mejores resultados de salud.

Mejoras en el flujo de trabajo clínico: automatización de las tareas no clínicas.
Los líderes de la salud son conscientes de que se enfrentan a problemas graves escasez de personal. Es un desafío al que se han enfrentado durante años y se ha convertido en una preocupación fundamental, ya que el agotamiento y la fatiga van en aumento. Además, los profesionales de la salud dedican una gran cantidad de tiempo a trabajo administrativo, relacionadas con las tareas de documentación y la recuperación de datos de los pacientes a través del sistema EHR.
Para compensar esta situación, los líderes innovadores están explorando nuevas formas de digitalización para desvíe las tareas no clínicas a los recursos adecuados. Con la capacidad de reconocer la voz y convertirla en texto, los asistentes de voz pueden capturar automáticamente las conversaciones entre médicos y pacientes y grabarlas en registros electrónicos electrónicos, de modo que los profesionales de la salud puedan transcribir fácilmente sus notas en tiempo real con la máxima precisión. Además, este proceso puede ampliarse a la gestión de las recetas y a la mayoría de las transacciones rutinarias, como la actualización de los registros de los pacientes o la obtención de informes personalizados.
Otro ejemplo del impacto de la digitalización en el entorno clínico es el aumento uso de asistentes de voz durante las estadías en el hospital. Los pacientes pueden utilizar el asistente digital de cabecera para registrar una amplia gama de consultas, como aumentar el dolor o pedir que les quiten la bandeja de comida. La tecnología de inteligencia artificial dirige cada solicitud a los mejores recursos, dirigiendo las necesidades no clínicas al departamento correspondiente. De este modo, se priorizan las necesidades clínicas del personal sanitario.
Por lo tanto, VAs reducir la carga administrativa en los profesionales de la salud y permitirles brindar una mejor atención clínica, dedicar tiempo a sus pacientes y familiares y tener un impacto directo en el bienestar y los resultados de salud. Además, también les permiten ver más pacientes en un día determinado, lo que se traduce en una mayor atención y un mejor acceso al sistema para la población en general.
Programación de citas y recordatorios
La cantidad de llamadas que el personal recibe diariamente para programar citas es extremadamente alta, y los pacientes no siempre pueden acudir en persona para programar las citas. El proceso se vuelve largo y tedioso, y algunos pacientes simplemente lo abandonan. Al integrar los asistentes virtuales en los sistemas de salud, los pacientes tienen la opción de concertar una cita a través de ellos.
Los asistentes extraen información sobre los profesionales disponibles, los días de trabajo y las franjas horarias y ayudar a los pacientes a programar sus citas. Además, también pueden ayudar a reprogramar o cancelar citas, gestionando cómodamente las solicitudes de los pacientes y ahorrando tiempo en la reserva de citas tanto para el médico como para el paciente. Del mismo modo, los VA también se pueden utilizar para proporcionar recordatorios automáticos de citas mediante llamadas telefónicas, lo que ayuda a los pacientes a recordar la fecha y la hora de su consulta y reduce las ausencias al hospital.
Adherencia a la medicación
Uno de los problemas más complejos y costosos de la atención médica domiciliaria en la actualidad es la adherencia a la medicación, que provoca muertes evitables, hospitalizaciones y fracasos del tratamiento. Los asistentes de enfermería brindan un apoyo importante para garantizar que los pacientes mantengan sus rutinas médicas con regularidad recordándoles qué medicamento tomar y cuándo, informándoles de la dosis requerida o notificándoles las recargas.
Además, los pacientes también pueden interactuar con el asistente, informándoles fácilmente qué medicamento se ha tomado generar un registro de medicación preciso. Estos datos pueden rastrearse en tiempo real o presentarse en consultas futuras, lo que proporciona a los profesionales de la salud más información sobre sus pacientes.
Clasificación y control de síntomas
Los VA pueden contactar a los pacientes y plantear las preguntas apropiadas a evaluar sus síntomas y su estado de salud. Luego, en función de las respuestas y los datos proporcionados por el paciente, pueden discernir entre aquellos pacientes que se encuentran en estado grave y necesita interacción con los médicos, y los que no lo hacen.
Un ejemplo de este caso de uso se puede encontrar en los programas posteriores al alta, en los que las enfermeras deben ponerse en contacto con los pacientes uno o dos días después de salir del hospital. Un sistema de salud del Atlántico Medio implementó un programa automatizado de comunicación después del alta para llegar a los pacientes y comprobar su bienestar. El asistente virtual hizo cuatro preguntas a los pacientes: 1) se sentían bien, 2) habían surtido sus recetas, 3) habían programado su cita de seguimiento y 4) conocían su plan de atención. Los que respondieron «no» a alguna de las preguntas fueron remitidos a una enfermera, lo que redujo considerablemente la cantidad de llamadas que el personal tuvo que hacer.
Durante el proyecto piloto, el 86% de los pacientes interactuaron con el asistente virtual y respondieron a las preguntas planteadas. Solo un tercio de estos pacientes tenían algún problema y necesitaban interactuar personalmente con las enfermeras, lo que les ahorró una enorme cantidad de tiempo y les permitió centrar la atención en las personas con necesidades inmediatas.
Asistencia médica en tiempo real, atención previa y posterior
Este es uno de los usos más intuitivos de los asistentes de voz en la actualidad, ya que muchos pacientes desean una resolución más rápida de sus consultas, sin tener que esperar una respuesta del hospital. Por lo tanto, recurren a los VA para obtener respuestas a preguntas sobre su situación particular. No estamos hablando de sistemas de voz equivalentes a los de escribir síntomas en un motor de búsqueda, sino de contenido médico especializado, cuidadosamente seleccionado y aprobado por médicos, que pueden ayudar a los pacientes en su tratamiento y recuperación.
Un buen ejemplo de esto sería alguien que se ha sometido recientemente a una cirugía y quiere saber el riesgo de mojarse los vendajes si se ducha. Los asistentes de voz ofrecen una forma fácil y cómoda de encontrar las respuestas que buscan a partir de contenido elaborado, científicamente preciso y actualizado.
Los asistentes virtuales mejoran la experiencia de soporte al ofrecer instante, automatizado, respuestas de alta calidad y soporte las 24 horas, los 7 días de la semana, ya que no tienen tiempo de inactividad. Este uso de asistentes de voz en la atención médica ayudará a evitar visitas innecesarias al médico, reingresos hospitalarios y costos médicos.
Incorporación y participación de los pacientes
Al principio, los VA respondían a las preguntas sencillas de los pacientes, pero hoy ayudan a los pacientes a encontrar los servicios que se ajusten a sus necesidades, lo que amplía el acceso a la atención médica dentro y fuera de los hospitales.
Los VA se caracterizan por su capacidad para aprender y mejorar sus interacciones, lo que les permite ofrecer a los pacientes un experiencia personalizada y respuestas concretas a sus situaciones, que ayudan a construir una relación de cercanía y confianza. Además, también ofrecen un forma flexible e intuitiva de acceder a la tecnología en múltiples plataformas e idiomas, lo que ayuda a ampliar la incorporación y la participación.
Por otro lado, también se traduce en una mayor comodidad y una mejor atención pacientes hospitalizados, ya que el uso de asistentes virtuales aumenta su autonomía y comodidad, al tiempo que garantiza una atención inmediata cuando sea necesario. Además, los pacientes también utilizan los asistentes virtuales con fines de entretenimiento, como comprobar el tiempo o reproducir música, lo que hace que las estadías en el hospital sean una experiencia más hogareña y sin estrés.
Fuera del hospital, es una opción con muchas posibilidades para los pacientes de edad avanzada y las personas dependientes, ya que agiliza la atención médica y los mantiene conectados tanto con los profesionales de la salud como con los miembros de la familia.
El asistente virtual de Tucuvi como solución automatizada para el personal médico.
En Tucuvi estamos transformando la forma en que se brinda la atención médica mediante la automatización de las llamadas telefónicas médicas. Nuestra empática asistente virtual basada en voz con IA, Lola, evalúa el estado de salud de los pacientes a través de conversaciones telefónicas naturales, mientras que nuestra plataforma se integra con las plataformas de EHR y telemedicina para facilitar la transmisión de datos. Nos esforzamos por automatizar cualquier tipo de llamada clínica, desde las llamadas previas a la consulta, las llamadas después de la cirugía o para el seguimiento continuo de los pacientes crónicos en el hogar.
A través de nuestra solución, los profesionales de la salud reciben datos estructurados y priorizados sobre el estado de sus pacientes a diario, lo que les brinda tiempo y conocimientos más inteligentes para brindar la mejor atención y les ayuda a saber cuándo contactar al paciente correcto en el momento adecuado. De este modo, se logra una mejor planificación, lo que mejora la eficiencia de los procesos de los hospitales y ahorra tiempo a los médicos. Las llamadas automatizadas aumentan la continuidad de la atención y permiten a los médicos anticipar posibles recaídas, lo que reduce las visitas a la sala de emergencias y los reingresos.
Para nosotros, uno de los aspectos más importantes es la experiencia de los pacientes cuando hablan con Lola. A lo largo de los años, hemos hablado con más de 20 000 pacientes y hemos mejorado nuestros algoritmos para lograr la latencia verbal más parecida a la humana. Además, hemos obtenido valores únicos en el mercado, alcanzando un +95% tanto en precisión como en participación de los pacientes y 4,7/5 en cuanto a la satisfacción del paciente.